Un cigarro y un trago de rabia para desayunar, promesas rotas. Dije un día que jamas dejaría de sonreír, pero en estos tiempos el mundo ha podido conmigo, un mundo donde un 'jamás' sale demasiado caro. El cielo no nos espera, juventud eterna, juventud perdida. ¿Oyes a los cuervos morir? Se acerca el fuego, huye. El asfalto no florece aunque lo reguemos con sangre. Entre la luna y el sol no hay mas que ceniza y miedo, promesas rotas. Decepción a las doce en punto, sigo sintiendo el mismo que ayer, las mismas ganas de romper con todo, mi corazón no entiende la autoridad...mi corazón ya no entiende nada.
no me extraña, a mi me pasa lo mismo :(
ResponderEliminarCreo que en el fondo me gusta no entender nada, me hace sentir ajena a esta masa de gente que tanto asco me da...supongo que me entiendes. Un abrazo de niña enrabietada :)
ResponderEliminarEl corazón solo entiende música. Yo también tengo días de cenizas, espero que pasen pronto. Un abrazo :)
ResponderEliminarPues si tu corazón no entiende nada, entonces tal vez el problema de los corazones es que son demasiado comprensivos.
ResponderEliminarUn beso del nihilista del norte xD a ver si hablamos más a menudo, pequeña.
Precioso texto, como siempre.
Cuidate =)
Le rouge et le noir...
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